:::Generalidades faunísticas:::

Cuando nos acercamos al Archipiélago, comenzamos a descubrir un pequeño micromundo, muy diferente al que nos rodea. Comenzamos a descubrir una serie de plantas y animales que, aunque similares, presentan unas ligeras diferencias en cuanto a forma, tamaño, comportamiento y relación con el entorno. Estas diferencias, con el paso del tiempo, les han ido diferenciando de sus aventureros ancestros continentales, que arribaron a este pequeño rincón del Atlántico hace miles de años.

En estas líneas, sólo se pretende mostrar al canario y al foráneo los indudables y frágiles valores que el tiempo creó en nuestra tierra, valores que han hecho de este lugar un espacio venerado por naturalistas y científicos de distintos lugares de Gaia, que vieron en las Afortunadas un auténtico laboratorio donde la azarosa evolución jugó a prueba y error, dando lugar a insólitos resultados.

Desde la perspectiva de la fauna, vamos a comenzar a conocer aquello que nos fue legado y que no debemos olvidar devolver a nuestros hijos.

Así, debemos destacar que la fauna canaria está muy emparentada con la existente en el norte de África y el sur de Europa. Sin embargo, difiere notablemente de éstas por poseer un elevado número de endemismos (especies exclusivas) y una relativa pobreza en especies.

Los invertebrados

Los invertebrados son los más numerosos, con unas 6.771 especies diferentes descritas hasta el momento, aunque estas cifras se ven constantemente modificadas por los continuos descubrimientos de nuevas especies, especialmente habitantes de los medios cavernícolas.

Los artrópodos componen el 92,3% de los invertebrados existentes en las Islas, con un total de 6.251 especies conocidas, de las que alrededor de 5.100 son insectos y, de ellos, 2.333 endémicos.

Los invertebrados no artrópodos presentan en los moluscos uno de los porcentajes más altos de endemicidad de todos los grupos faunísticos de Canarias, con el 84% de las especies. Dentro de los invertebrados, es interesante destacar los casos extremos de radiación adaptativa que han sufrido algunos géneros, como las Hemicyclas (Molusco), con 54 especies, Dysdera (Arácnido), con 50, y Laparocerus (Coleóptero), con 65, entre otros.

Los vertebrados

Los vertebrados están compuestos por 124 especies silvestres, donde el grupo de los reptiles presenta el mayor porcentaje de endemicidad, con el 85% de las especies, compuesto por tres familias: Lacertidae, Scincidae y Gekkonidae.

La familia Lacertidae es la mejor distribuida, estando presente en todas las islas por un género endémico (Gallotia). La abundancia de lagartos en las Islas es muy alta, alcanzando densidades que rozan la superpoblación en especies como el lagarto tizón (Gallotia gallotii). Por otro lado, dentro de este mismo género, se encuentran los tres reptiles más amenazados del Estado español: el Lagarto Gigante de El Hierro (Gallotia simonyi) y los recientemente descubiertos en la isla de Tenerife, el Lagarto Moteado (Gallotia intermedia) y en la de La Gomera, el Lagarto Gigante Gomero (Gallotia bravoana).

Los anfibios

Los anfibios presentes en las Islas son dos, la Ranita Meridional (Hyla meridionalis) y la Rana Común (Rana perezi), introducidos en las Islas tras la llegada de los conquistadores en el siglo XV.

Las aves

La avifauna canaria se encuentra compuesta por 89 especies nidificantes, de las cuales 6 se consideran especies exclusivas del Archipiélago: la Paloma Rabiche (Columba junoniae), la Paloma Turqué (Columba bolli), el Pinzón Azul (Fringilla teydea), la Tarabilla Canaria (Saxicola dacotiae) y, recientemente descritas como especies aparte, el Mosquitero canario (Phylloscopus canariensis) y el Reyezuelo de Tenerife (Regulus teneriffae). Además, durante el presente siglo se produjo la extinción de otro endemismo, el Ostrero Unicolor Canario (Haematopus meadewaldoi), que sólo habitó en las islas orientales.

El Archipiélago, al mismo tiempo, alberga una serie de endemismos compartidos con otras islas macaronésicas: el Vencejo Unicolor (Apus unicolor), el Canario (Serinus canaria) y el Bisbita Caminero (Anthus berthelotii). También destaca la presencia de una treintena de subespecies, algunas muy bien diferenciadas de sus congéneres continentales. El caso de los herrerillos africanos (Parus teneriffae) y los pinzones vulgares (Fringilla coelebs) de las Islas es destacable, debido a la diversidad que éstos presentan en las Islas, presentando cuatro y tres subespecies, respectivamente.

Las aves marinas y las rapaces son otros de los grupos de aves interesantes en las Islas, albergando las únicas colonias del Estado de Paiño Pechialbo (Pelagodroma marina), Paiño de Madeira (Oceanodroma castro), Petrel de Bulwer (Bulweria bulwerii), Pardela Pichoneta (Puffinus puffinus) y Pardela Chica (Puffinus assimilis), entre las procelariformes (aves marinas pelágicas). Las rapaces, como el Halcón de Eleonora (Falco eleonorae) y el Águila Pescadora (Pandion haliaetus), presentan importantes poblaciones en el ámbito estatal. Además, el Halcón Tagarote (Falco pelegrinoides), de distribución norteafricana, ocupa en Canarias el limite occidental de su distribución.

No es de extrañar que las cifras de especies de aves en las Islas tienda a aumentar (aunque disminuyan los tamaños de las poblaciones), debido a la transformación de hábitat naturales y a la importancias que las Islas tienen como punto de descanso para un importante número de aves migratorias, que usan la ruta atlántica. Hasta el momento se han contabilizado 338 aves no nidificantes que aparecen en las Islas, invernando, en tránsito o de forma accidental, como ocurre con un importante número de especies nearticas (Norteamérica), entre las que destaca el Chorlito Dorado americano (Pluvialis dominica) y el Porrón de Collar (Aythya collaris).

Los mamíferos

El grupo de los mamíferos está representado en las Islas por 18 especies, en su mayoría introducidas voluntaria o involuntariamente por el hombre. Sólo los murciélagos y las musarañas son mayoritariamente autóctonos, con 7 y 3 especies respectivamente. Del total de murciélagos, tan sólo uno es endémico de las Islas, el Orejudo Canario (Plecotus teneriffae), que se distribuye en Tenerife, La Palma y El Hierro. Algo mejor distribuido se encuentra otro endemismo, pero en este caso macaronésico, como es el Murciélago de Madeira (Pipistrellus maderensis), que habita en las Canarias occidentales.

La Musaraña Canaria (Crocidura canariensis) y la Musaraña de Osorio (Crocidura Osorio) son los otros dos mamíferos endémicos. El resto de especies de este grupo fue introducido por el hombre, algunos de ellos acompañaron a los isleños hace unos 2.500 años y otros, en fechas relativamente recientes, como es el caso de la Ardilla Moruna (Atlantoxerus getulus), introducida en la isla de Fuerteventura a finales de los años sesenta.

Sin lugar a dudas, la arribada de especies foráneas ha propiciado el empobrecimiento de los frágiles ecosistemas insulares, motivando la extinción de especies endémicas de flora y fauna. De hecho, es probable que la desaparición de la Rata Gigante (Canariomis bravoi), el Lagarto Gigante (Gallotia golliath), la Codorniz Gomera (Coturnix gomerae), el Verderón de La Palma (Carduelis triasi) y el recientemente descrito Escribano Patilargo (Emberiza alcoverii), tengan el motivo de su desaparición en la competencia a la que se vieron sometidos por depredadores introducidos por el hombre.

Bibliografía

MACHADO, A. 1998. Biodiversidad. Un paseo por el concepto y las Islas Canarias. Santa Cruz de Tenerife: Cabildo Insular. MARTÍN, A., y J. A. Lorenzo. 2001. Aves del Archipiélago Canario. La Laguna: Francisco Lemus. PALOMO, L. J., y J. Gisbret. 2002. Atlas de los Mamíferos terrestres de España. Madrid: Dirección General de Conservación de la Naturaleza – SECEM – SECEMU. PLEGEZUELOS, J. M.; R. Marquéz, y M. Lizana (eds.). 2002. Atlas y Libro Rojo de los Anfibios y Reptiles de España. Madrid: Dirección General de Conservación de la Naturaleza – Asociación Española de Herpetología. TRUJILLO, D. 1991. Murciélagos de Las Islas Canarias. Serie Técnica. ICONA.

Autor: Juan José Ramos

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